- "Esta es una situación catastrófica para el Capitolio de nuestra nación. No tenemos un número de víctimas aún, pero les puedo adelantar que más de una docena de personas murieron en la explosión. Hay gente aún respirando, y sacan a las víctimas."
- ―Carrie Birmingham
El Bombardeo del Capitolio de los Estados Unidos fue un ataque terrorista orquestado por Lex Luthor en un intento de poner al público en contra de Superman y evitar que June Finch exponga sus motivos.
Antecedentes[]
Audiencia de Wallace Keefe[]
- "Él me hizo medio hombre. Déjeme enfrentarlo. Mi esposa me abandonó. Ni siquiera puedo orinar de pie. Déjeme enfrentarlo."
- ―Wallace Keefe a June Finch
Durante la Batalla de Metrópolis, Wallace Keefe perdió ambas piernas al quedar atrapado en los escombros, generando un inmenso odio hacia Superman. Dos años después, Keefe vandalizó con grafiti su estatua en el Parque de los Héroes, provocando que sea arrestado por el Departamento de Policía de Metrópolis. Aprovechando esta oportunidad para poner en marcha su malévolo plan contra Superman, Lex Luthor pagó la fianza de Keefe y le entregó una nueva silla de ruedas que contenía secretamente en su interior una bomba forrada de plomo, ofreciéndole testificar contra Superman ante el Senado de los Estados Unidos.
Keefe aceptó la solicitud de Luthor y acudió al Capitolio de los Estados Unidos para solicitar una audiencia a la Senadora June Finch, quien decidió enviar un anuncio público invitando a Superman al comité para defender sus acciones en la Batalla de Metrópolis y la Masacre en Nairomi. En busca de consejo, Kent visitó a su madre en Smallville, donde ésta explicó que la gente temía a lo que no entendía, motivándolo a seguir siendo un héroe si quería, ya que no le debía nada al mundo.[1]
Asesinato de Kahina Ziri[]
- "No solo le pagó, la amenazó. Le dio un guión para aprenderse. Sus padres siguen vivos en su casa, pero la chica tiene consciencia. Él ha manipulado al comité como un títere."
- ―June Finch a Senador
Poco antes del incidente en el complejo de Nairomi, Kahina Ziri fue chantajeada y amenazada de muerte por Lex Luthor, con tal de que Ziri se memorice un guión falso en el que acusaba a Superman de la muerte de sus padres. Durante una entrevista con June Finch, Ziri recitó el guión, alegando que Superman nunca respondería ante el Gobierno de los Estados Unidos ni ante Dios.
Semanas después, sintiéndose culpable por testificar falsamente contra Superman, Ziri visitó el Capitolio de los Estados Unidos y logró revelar la verdad de su chantaje a la Senadora Finch. Sin embargo, antes de poder escapar en un tren, Ziri fue empujada a los rieles del tren entrante por Anatoli Knyazev bajo órdenes de Luthor, eliminando el último cabo suelto de su plan.[1]
Bombardeo[]
- "Me he parado aquí en el pasado, para decir que este comité no tolerará intervenciones no autorizadas, tampoco mentiras; porque hoy... se va a decir la verdad. Porque solo hablando de... solamente trabajando juntos se puede.... se, se puede..."
- ―June Finch
El día de la audiencia, Kal-El apareció sobre el Capitolio de los Estados Unidos, a pesar de que los medios especularon lo contrario. Kal-El fue rodeado por manifestantes en su contra, antes de ingresar a la sala de audiencia. Ahí, June Finch presentó a Wallace Keefe y agradeció al kryptoniano por acudir, alegando que así es como funcionaba la democracia. Mientras daba su discurso, Finch notó un frasco de orina en su escritorio, volviéndose incapaz de hablar. Repentinamente, la silla de ruedas de Keefe generó una gran explosión que mató a todos los presentes con excepción de Superman, quien mostró una fuerte expresión de dolor por no poder salvarlos.[1]
Consecuencias[]
Poco después de la explosión, Kal-El se encargó de ayudar a los heridos llevándolos con el equipo médico a un lugar seguro, trayendo también los cuerpos de las víctimas para ser reconocidos. Mientras contemplaba con horror los cadáveres de las víctimas, él se llenó se culpa y dudas, observando con mirada de tristeza y arrepentimiento a Lois Lane, antes de salir volando de la escena.
Superman fue parcialmente culpado por el incidente, con muchos comenzando a creer él tuvo algo que ver con el atentado. Lleno de culpa y creyendo que no pudo detener la explosión por no estar lo suficientemente atento, Kal-El visitó a Lane en el balcón de su habitación, alegando que Superman nunca había sido real. Aunque Lane intentó recordarle que su símbolo significaba algo para su mundo, Kent decidió auto exiliarse en montañas nevadas lejanas, donde se topó con una manifestación de su padre Jonathan Kent.[1]