- "No puedo creer que haya tenido una bala."
- ―Harleen Quinzel
El Asesinato de Silvio Luna fue un movimiento ejecutado por Harleen Quinzel poco después de descubrir las intenciones malévolas de Silvio Luna como Presidente de Corto Maltese, tomándolas como una señal de alarma a su reciente relación.
Antecedentes[]
- "El almuerzo está listo. ¿Tendría la gentileza de acompañarme?"
"Sí, eso es lo mío. Claro." - ―Silvio Luna y Harleen Quinzel
En medio de la batalla en la playa de Corto Maltese, Harleen Quinzel fue capturada por soldados de las Fuerzas Armadas de Corto Maltese, luego de recibir la jabalina de Gunter Braun. Bajo órdenes de Silvio Luna, Quinzel fue inicialmente aprisionada en un pozo bajo tierra y atada de manos para no poder escapar. Por la mañana, los soldados le entregaron un vestido rojo que debía usar para visitar al presidente Luna, quien quería conocerla. A bordo de una lujosa limusina, Quinzel fue maquillada y arreglada por los empleados de Luna.
Al llegar a la casa de gobierno, el personal de Luna le dio una formal bienvenida a Quinzel, quien al ingresar, se encontró con Luna en medio de una sesión de baño. Luna la recibió, viéndola como una heroína y un símbolo anti-estadounidense para todo el pueblo de Corto Maltese. Dicho esto, Luna la invitó a pasar una tarde romántica, en la que ambos disfrutaron un agradable almuerzo, contemplaron el paisaje y jugaron con las aves de Luna.[1]
Asesinato[]
- "Hace poco me hice la promesa que si tenía un novio, estaría atenta a las señales de alarma, y si veía una haría lo más sano, y eso es matarlo. Y matar niños... es una señal de alarma."
- ―Harleen Quinzel a Silvio Luna
Al caer la noche, Silvio Luna le propuso matrimonio a Quinzel, quien aceptó luego de creer inicialmente que se trataba de una broma. Acto seguido, Quinzel y Luna tuvieron relaciones sexuales intensas, en las que destrozaron gran parte de la habitación, incluidos escaparates con armas, retratos y decoraciones. Al terminar, Quinzel observó la fortaleza de Jotunheim desde la ventana, entonces, Luna le reveló que Jotunheim había sido construido tras la Segunda Guerra Mundial, comentando los rumores de una bestia que era utilizada por la Familia Herrera para continuar en el poder, enviando a sus enemigos políticos a Jotunheim para que la bestia los devore.
Dicho esto, Luna reveló que dichos rumores eran ciertos, explicando sus planes para tomar el control de Jotunheim y de la bestia, con la intención de enviar a todos los opositores de su gobierno junto con sus padres, hijos, familiares y personas cercanas para ser devorados por la bestia. Al escuchar esto, Quinzel se apresuró en agarrar un arma de las vitrinas para dispararle a Luna en el pecho. Mientras agonizaba, Luna escuchó a Quinzel revelarle su propia promesa de asesinar al próximo novio tóxico que tuviera tras su relación con el Guasón. Una vez que Luna falleció, Quinzel se sorprendió al ver que el arma estaba cargada.[1]
Consecuencias[]
- "Silvio era un hermano para mí, pero siempre fue un romántico. Quería que el mundo lo tomara seriamente, mientras jugaba con sus pájaros."
- ―Mateo Suarez
Momentos después de la muerte de Silvio Luna, Harleen Quinzel fue detenida y capturada por los soldados de las Fuerzas Armadas, siendo llevada a una cámara de tortura. Esa misma noche, los generales de las Fuerzas Armadas eligieron unánimemente a Mateo Suarez como sucesor al puesto de Presidente de Corto Maltese. Luego de dar unas palabras en honor de Luna e incinerar sus aves, Suárez se dirigió a la cámara de tortura para extraer información a Quinzel, ordenando la captura de todos los estadounidenses que habían llegado al país.[1]